sombra de esqueleto de dinosaurio

Las 5 grandes extinciones masivas

Prepárate para un viaje alucinante por los rincones más oscuros y misteriosos de nuestro planeta. ¿Listo? Vamos allá.

Imagina un escenario apocalíptico donde, en un abrir y cerrar de ojos geológico, ¡boom! El 75% de las especies que conocemos desaparecen. Sí, has leído bien, ¡75%! Esto es lo que llamamos una extinción masiva, y en los últimos 540 millones de años, ¡sorpresa! Hemos tenido cinco de estos desastres cósmicos.

Ahora, no te confundas. A veces escuchamos hablar de los eventos de nivel de extinción, o ELE por sus siglas en inglés, y pensamos que son lo mismo que las extinciones masivas. Pero, ¡error! Los ELEs son los culpables de esas aterradoras extinciones masivas.

Hablamos de colisiones épicas con meteoritos gigantes, erupciones volcánicas que oscurecen el cielo, supernovas que nos miran desde la distancia, ¡o incluso el surgimiento de nuevas especies que arrasan con todo a su paso!

Y aquí viene la bomba: ¿estamos viviendo ahora mismo una extinción masiva? ¿Es el Holoceno el escenario de la sexta gran extinción? Y, ¡atención! ¿Podría haber ocurrido una extinción masiva en los albores de la vida compleja, con las células eucariotas tomando el escenario y dejando atrás a los modestos procariotas? ¿Y qué pasa con la fauna de Ediacara, esa extraña colección de seres que desapareció misteriosamente? Todo está en juego, y las piezas del puzzle están ahí, esperando ser descubiertas.

Así que, ¿qué te parece? ¿Listo para desentrañar los misterios de nuestro pasado planetario? ¡Vamos a ello!

El enigma de las extinciones masivas del Ordovícico-Silúrico

¡Imagina un mundo lleno de vida y diversidad, donde los mares rebosan de criaturas fascinantes y la tierra comienza a ser habitada por seres increíbles! Así era nuestro planeta durante el período Ordovícico, justo después de la Explosión Cámbrica, cuando la vida compleja comenzaba a dar sus primeros pasos.

En aquellos tiempos, el vasto océano Panthalassa dominaba la mayor parte del globo terráqueo, y en sus aguas danzaban especies legendarias como los trilobites, mientras los primeros peces exploraban las corrientes cálidas. Además, en la superficie emergieron las primeras plantas y se cree que los primeros artrópodos también comenzaron a poblar la tierra firme.

Sin embargo, entre hace 450 y 440 M.A., ocurrió un evento catastrófico que cambió el curso de la historia de la vida en la Tierra. Imagina que aproximadamente el 60% de todos los géneros que habitaban nuestro planeta desaparecieron de la noche a la mañana. Y eso no es todo, se estima que un 85% de todas las especies marinas se extinguieron en ese período.

¿Qué pudo desencadenar esta devastación en la biodiversidad? Ahí es donde comienza el misterio y la especulación, pues es la única donde no se ha encontrado evidencia llamativa de impactos extraterrestres ni vulcanismo. Hay varias teorías rondando, desde glaciaciones masivas que cambiaron drásticamente el nivel de los océanos, hasta misteriosos eventos cósmicos. Otros hablan de desplazamientos polares, que dejarían desprotegidos a todo ser vivo contra los rayos solares. ¡Incluso se ha especulado con el impacto de la radiación de una supernova!

Inquietantes teorías cósmicas

Bueno, las hipótesis que nos ofrece el universo te dejarán boquiabierto:

  • ¡La Teoría Shiva! Según esta increíble idea, cuando nuestro planeta atraviesa los densos brazos espirales de la galaxia, se encuentra en un verdadero campo de batalla cósmico. Explosiones estelares y vientos estelares intensos que azotarían nuestra querida Tierra, mientras la nube de Oort se agita expeliendo cometas y asteroides hacia los planetas interiores. ¡Es toda una montaña rusa galáctica!
  • La segunda teoría, propuesta por Mellot y su equipo en 2004, nos lleva a un viaje aún más emocionante. ¡Imagina una supernova explotando cerca de nosotros, enviando un pulso de rayos gamma directamente hacia nuestro planeta! En solo unos diez segundos, toda la capa de ozono podría ser destruida, dejando la vida expuesta a los peligrosos rayos ultravioleta del sol. Y si eso no es suficiente, la radiación gamma también liberaría gases que bloquearían la energía del sol, sumiendo al planeta en un enfriamiento global catastrófico. ¡Muy pocos sobrevivirían a algo así!

Algunos expertos incluso buscan un isótopo especial de hierro-60, que solo se forma en condiciones extremas de radiación, como una firma cósmica de estos eventos devastadores. ¡Es como encontrar pistas en una escena del crimen cósmico!

¿Misterio resuelto?

Entonces, ¿qué significa todo esto? Bueno, según estas teorías, podríamos estar hablando de extinciones masivas que ocurren en un abrir y cerrar de ojos. Un lapso de tiempo que podría ser tan breve como un año o hasta mil años. Estas teorías verdaderamente impactantes desafían nuestra comprensión del tiempo y del espacio, y nos sumergen en un mundo de misterio y aventura cósmica.

Aquí la clave: ¡nadie sabe con certeza qué causó realmente estas extinciones masivas! El debate sigue abierto y los científicos continúan investigando. Buscando pistas en los estratos de rocas y en los fósiles del pasado. Una cosa es segura, ¡el Ordovícico-Silúrico nos deja con más preguntas que respuestas!

La extinción del Devónico

¡La extinción masiva del Devónico, un evento que sacudió los cimientos de la vida en la Tierra hace entre 408 y 360 millones de años!

Tras el impresionante despliegue de biodiversidad que siguió a las extinciones del Ordovícico-Silúrico, la Tierra entró en lo que algunos llaman la «Edad de los Peces». Los océanos bullían con una asombrosa variedad de vida marina, peces óseos, cuyos descendientes aún nadan en nuestros mares. Multitud de corales, esponjas, artrópodos y cefalópodos. Además, en esta época surgieron los primeros bosques, testigos de los albores de la vida terrestre.

Sin embargo, este frenesí de diversidad pronto se vio interrumpido por una nueva catástrofe. De repente, hasta el 83% de las especies desaparecieron, sumiendo a la Tierra en una crisis biótica de proporciones catastróficas. Pero, ¿cuál fue la causa de esta tragedia?

Las teorías abundan, pero ninguna ofrece una explicación definitiva. Algunos científicos sugieren que una glaciación repentina, similar a eventos anteriores. Otros apuntan al vulcanismo desenfrenado o incluso al impacto de meteoritos como posibles culpables.

Sin embargo, una investigación reciente plantea una nueva y espeluznante posibilidad. ¿Y si un calentamiento repentino desvaneció la capa de ozono, dejando a la superficie de la Tierra vulnerable a la radiación ultravioleta del sol?. Esta hipótesis plantea un escenario apocalíptico en el que la vida en la Tierra es arrasada por una inundación de radiación mortal. Y lo que es aún más inquietante, sugiere que un evento similar podría ocurrir en nuestros días si se alinearan las condiciones adecuadas.

Teorías a la carta

  • Impacto Meteorítico: Algunos científicos sugieren que los dos grandes eventos de extinción del Devónico podrían haber sido desencadenados por la caída de varios meteoritos. Sin embargo, las dataciones radiométricas no muestran una correlación directa entre los impactos meteoríticos y las extinciones, lo que deja el misterio sin resolver.
  • Condiciones de Anoxia: Durante los límites Frasniense-Fameniense y Devónico-Carbonífero, los océanos experimentaron condiciones de anoxia o bajos niveles de oxígeno, que podrían haber sido letales para la vida marina. La presencia de lutitas negras en todo el planeta sugiere este escenario. Sin embargo, las objeciones basadas en la falta de correlación temporal con las extinciones y la gradualidad de la pérdida de oxígeno dejan este enigma sin resolver.
  • Salinidad de las Aguas: Se ha postulado la teoría de un océano estratificado, con capas superiores de agua dulce o salobre. La presencia de ciertas valvas fósiles en facies, o sedimentos marinos, del Devónico superior apunta a esta posibilidad. Podría ser una explicación inusual para las extinciones del límite Devónico-Carbonífero.
  • Vulcanismo: La desmesurada actividad eruptiva asociada a los traps, o formaciones basálticas, de Viluy en Siberia, de forma sobresaliente. También de Pripyat-Dnieper-Donet, en el este de Europa, más discretamente. Pudo haber emitido un volumen masivo de roca volcánica, contribuyendo a la catástrofe. Según los cálculos, la actividad eruptiva que dio lugar a estos traps podría haber emitido un volumen de roca volcánica de unos 2 000 000 km³. Así pues esto lo convierte en la explicación más plausible (sin ser definitiva) de la extinción.

La «Gran Mortandad» o extinción masiva del Pérmico-Triásico

¡La «Gran Mortandad», el evento que sacudió los cimientos de la vida en la Tierra hace unos 252 M.A.!

La extinción masiva Pérmico-Triásico no fue una extinción cualquiera, fue una catástrofe sin precedentes. Arrasó hasta con el 95% de las especies marinas y un 70% de las terrestres en un abrir y cerrar de ojos geológicos. Imagina la magnitud de esta tragedia cósmica.

Durante mucho tiempo se pensó que esta extinción masiva fue un proceso gradual, que duró varios millones de años. Pero nuevos indicios sugieren un evento que duró menos de un millón de años. Entre hace 252,3 y 251,4 M.A., ambas fechas con ±300 000 años de margen. Un tiempo relativamente corto a escala geológica. Los seres vivos sufrieron tasas de reducción de población similares por todo el mundo, lo que apunta a un súbito evento global, ni local ni gradual.

Nuevas evidencias de los estratos en Groenlandia sugieren una doble extinción. La primera de ellas, más suave, habría ocurrido 9 M.A. antes del final del Pérmico. Esta doble extinción es lo que había hecho pensar que la extinción masiva había durado varios millones de años.

Definitivamente la «Gran Mortandad» fue mucho más que una simple extinción. Fue un golpe devastador que alteró para siempre el curso de la vida en la Tierra. Dejando un rastro de desolación y misterio que continúa fascinando a científicos y a todo aquel que se adentra en sus catastróficos enigmas. Este sigue siendo uno de los secretos más oscuros de nuestro planeta.

¿Qué pudo causar una hecatombe así?

Dispares teorías compiten por explicar el enigma inexplicable:

  • La pista más caliente nos lleva a las majestuosas traps o escaleras siberianas, testigos de las más furibundas erupciones volcánicas. Junto con las dolomitas italianas, narran una historia de fuego y furia que estremece los cimientos de la Tierra.
  • Hace unos 252 M.A. el rugido de los volcanes llenó el cielo con humos tóxicos y gases mortales. La temperatura se disparó hasta 5 grados, desencadenando cambios geoquímicos globales que pusieron al planeta al borde del colapso. Liberando gases atrapados en las profundidades oceánicas lo que desató el caos.
  • El azufre, convertido en un enemigo del suelo, acidificó la tierra hasta niveles infernales. Con un PH de 2,3 en zonas concretas ¡el nivel de acidez del zumo de limón! Este ácido corrosivo fue el verdugo de innumerables criaturas con caparazón y algas marinas. Mientras que en tierra firme, las plantas luchaban por sobrevivir en un mundo hostil e inhóspito.
  • El tremendo cráter de 500 Km en la Tierra de Wilkes de la Antártida, atestigua un impacto pudo influir en la extinción. Además de la disgregación de la Antártida y Australia de Gondwana. Se especula que dicho impacto podría haber provocado una onda de tipo sísmico. Esta a su vez produjo la ruptura de la corteza terrestre en el punto opuesto de la Tierra o antípoda. En este punto se encontraban en esa época las traps siberianas, así que la teoría del impacto concuerda con la hipótesis del vulcanismo.

Veredicto… ¿…definitivo?

A pesa de que las evidencias apunten con determinación a la inconmensurable actividad volcánica, la resolución del enigma de la Gran Mortandad no será tan simple. El caso dista mucho de estar cerrado. Para producir semejante nivel de destrucción, jamás visto antes ni después, las especies debieron haberse visto asediadas desde varios frentes. Por ello, actualmente se cree en la posibilidad de una concatenación de todos estos factores. Los cuales convergieron en el tiempo para que la extinción masiva del Pérmico-Triásico desencadenara el que, de largo, fue el evento de extinción y destrucción sobre la biosfera más devastador que la Tierra haya conocido.

Extinción masiva del Triásico-Jurásico

Retrocedamos en el tiempo hasta hace unos impresionantes 201 M.A. hasta uno de los eventos más devastadores y trascendentes del planeta, la extinción masiva del Triásico-Jurásico

Tan solo 50 millones de años después de la última gran extinción, ¡un evento arrasó con el 75% de todas las especies que poblaban la Tierra en ese momento! Fue como si la naturaleza presionara el botón de reinicio, dando paso al reinado absoluto de los dinosaurios, que aún eran minoritarios. Los arcosaurios, terápsidos y grandes anfibios, desaparecieron en un abrir y cerrar de ojos geológicos. Esto fue el impulso que necesitaban los dinosaurios para ocupar los nichos ecológicos que dejaron vacantes.

¡Y AQUÍ COMENZO LA EDAD DORADA DEL REINADO DE LOS DINOSAURIOS!

¿Qué causó esta catástrofe?

Las miradas de los científicos apuntan hacia los volcanes, esos gigantes de fuego que desataron su furia sobre la Tierra, aumentando los niveles de gases de efecto invernadero y acidificando los océanos.

¡Pero esta no fue una erupción más! Las evidencias sugieren que estas erupciones volcánicas se concentraron en una región conocida como la «provincia magmática del Atlántico Central«, un lugar marcado por la fragmentación del supercontinente. ¡Cuan poderoso debió de ser este evento para dar inicio a la fragmentación de Pangea! Durante al menos 600.000 años, este caldero de magma fue el epicentro de una actividad volcánica descomunal, ¡una verdadera olla a presión lista para estallar!

Pero no todo está claro en este escenario apocalíptico. También se baraja la posibilidad de que uno o varios meteoritos, aunque más pequeños que el que acabó con los dinosaurios en el Cretácico-Paleógeno, hayan jugado un papel en esta tragedia prehistórica. Es como si la Tierra estuviera siendo atacada desde múltiples frentes, ¡un verdadero choque de titanes cósmicos! Esto parece una constante en los más colosales eventos de extinción. Tal parece que estos impactos cósmicos desestabilizase los cimientos del mismísimo planeta. Produciendo una respuesta geológica desde las entrañas de la Tierra. Esta derrama su lava cual sangre que brota bullendo de sus heridas abiertas, hasta que consigan restañarse por si solas.

¡Adiós Dinosaurios! La gran extinción masiva del Cretácico-Paleógeno

Hace unos 66 M.A. un gigantesco meteorito, el Chicxulub, de unos colosales 14 kilómetros de diámetro, se precipita desde el espacio hacia la Tierra a una velocidad impresionante. En solo 20 segundos, atraviesa la atmósfera con una furia imparable y golpea la península de Yucatán con una fuerza cataclísmica.

El impacto es una verdadera tormenta de destrucción. La energía liberada desata una onda de choque que barre todo a su paso, devastando la vida en cientos de kilómetros a la redonda. Tsunamis gigantescos barren las costas, y toneladas de rocas sulfurosas se vaporizan, llenando los cielos de una nube espesa que bloquea la luz del sol durante años. La Tierra queda sumida en la oscuridad y el caos.

Esta catástrofe, conocida como la extinción masiva del Cretácico-Paleógeno, arrasa con aproximadamente dos tercios de las especies del planeta. Los reptiles y los dinosaurios no aviares, especialmente aquellos de más de 40 kilos de peso, son los más afectados. Dejando solo a tortugas y cocodrilos como testigos de su antiguo dominio. Y emergiendo como los verdaderos triunfadores en este nuevo mundo postapocalíptico ¡los mamíferos! Liberados de la competencia de los dinosaurios, comienzan a conquistar la Tierra y se abren paso hasta nuestros días.

Sin embargo, este cataclismo no es solo obra del Chicxulub. Se cree que el calentamiento global provocado por las erupciones volcánicas en las traps o escaleras del Decán, en la India, pudo haber exacerbado la situación.

Algo más que sospechas de complicidad

Si bien a habido episodios de erupciones cataclísmicas masivas de forma aisladas y solitarias. Cada vez que hay registro de alguna colisión cósmica, de grandes dimensiones, siempre aparecen evidencias de masivas actividades de vulcanismo asociadas. Algunos científicos incluso plantean la posibilidad de que algunas de estas erupciones, no sólo en este cataclismo, hayan sido desencadenadas por el propio impacto del meteorito. ¡Un auténtico golpe de doble devastación!

No es descabellado pensar que un impacto de semejante potencia, retumbe hasta lo más hondo de las entrañas de nuestra Madre Tierra. Desencadenando procesos eruptivos de masas ígneas de las profundidades de su vientre. Convirtiéndose así en cómplices recurrentes de sucesivos eventos catastróficos, que multiplicarían exponencialmente la consecuencias del crimen ecológico, padecido cíclicamente por nuestro hogar.

La teoría de los múltiples impactos

La hipótesis o teoría de los múltiples impactos surge como una posible explicación de la extinción masiva del Cretácico-Terciario. Se plantea que varios meteoritos golpearon la Tierra, o bien, que un solo meteorito se fragmentó al entrar en la atmósfera, creando una lluvia de fragmentos. Acontecimiento similar a lo registrado en 1994 cuando el cometa Shoemaker-Levy 9 se desgajo en varios trozos e impactó con Júpiter.

El famoso cráter de Chicxulub sería uno de estos impactos, pero no el único. Otros posibles sitios de impacto incluyen el cráter Silverpit en el fondo del Mar del Norte y el cráter Shiva en las profundidades del Océano Índico, cerca de Bombay, India. Todos ellos datados en el mismo espacio de tiempo.

Así que ahí lo tienes, otro evento monumental que cambió el curso de la historia de la Tierra para siempre. Este repentino, de apenas unos meses, y puede que aún más rápidas consecuencias sobre la biota del planeta. Una historia de destrucción y renacimiento, donde los mamíferos emergieron como los nuevos dueños del planeta. ¡Un verdadero drama cósmico que nos recuerda la fragilidad y la resiliencia de la vida en nuestro querido hogar azul!

Extinción 0: Una gran extinción antes de las grandes extinciones

Si bien se conocen cinco extinciones masivas que sacudieron nuestro planeta, un estudio reciente sugiere que antes de todas ellas, hace unos 550 M.A.

Desde el Ordovícico hasta el Cretácico, la Tierra ha sido testigo de eventos de extinción masiva que han dejado su huella en los registros geológicos. Sin embargo, el paleobiólogo Scott Evans y su equipo de Virginia Tech han realizado un profundo análisis de datos sobre fósiles raros del Ediacárico, un período que precedió a la famosa explosión Cámbrica. Los resultados son asombrosos: ¡se han descubierto cambios drásticos en la biodiversidad que sugieren un evento de extinción masiva anterior a todos los conocidos hasta ahora! Se estima que hasta un 80% de las especies desaparecieron en este período.

Este hallazgo desafía nuestra comprensión previa de la historia de nuestro planeta y plantea nuevas preguntas sobre lo que realmente sucedió en ese lejano pasado. ¿Qué eventos desencadenaron esta gran extinción antes de las grandes extinciones?

Anoxia oceánica

Los misteriosos organismos ediacáricos, con sus formas blandas y enigmáticas que apenas dejaron evidencias, como conchas o esqueletos, han intrigado a los científicos durante décadas. En su registro fósil sólo hay leves huellas, preservadas vagamente en arena o ceniza, generando debates sobre su desaparición. Y, finalmente, ¡nuevos descubrimientos arrojan luz sobre este enigma!

Los expertos sugieren que la extinción masiva que marcó el final del período Ediacárico pudo ser desencadenada por una variedad de factores. Desde la fragmentación de los supercontinentes hasta cambios en la atmósfera y la química oceánica, se han considerado diversas causas. Sin embargo, un factor clave parece destacar entre todos: la reducción del oxígeno en los océanos.

Este fenómeno, respaldado por evidencia geoquímica reciente, revela que más del 20% del lecho marino presenta evidencias de anoxia oceánica al final del Ediacárico. ¿Qué significa esto para los organismos marinos? Los estudios sugieren que aquellos que sobrevivieron eran criaturas más grandes, similares a los helechos, adaptadas para enfrentar condiciones de bajo oxígeno.

¿Cómo se adaptaron? Maximizando las proporciones relativas de células en contacto directo con el agua de mar, estos organismos encontraron una manera de prosperar en entornos con niveles reducidos de oxígeno.

Extinciones sin fin

La simple idea de contabilizar las extinciones masivas cada vez pierde mas sentido. Cuanto más indagamos más se descubren en un pasado tachonado de acontecimientos cataclísmicos y desapariciones de familias de especies animales. Estos eventos de extinción masiva, que cada vez parecen más comunes en la historia de la Tierra, como si todo este planeta atentase contra la vida misma.

Esto contradeciría parcialmente la hipótesis de Gaia, postulada por el ambientalista James Lovelock. La cual define la biosfera como un sistema bondadoso que se autorregula para favorecer la vida. Si bien afianza la hipótesis de Medea popularizada por el paleontólogo Peter Ward. Que contrariamente a la anterior aduce que la biosfera no existe en armonía ni tiene como objetivo preservar la vida.

No obstante cada vez que el universo golpea, la vida responde con una poderosa reticencia a desaparecer. La vida siempre encuentra el camino, adaptándose hasta más allá de lo esperado, y no rindiéndose jamás.

¡Así ha sido siempre y así seguirá siendo!

La inquietante teoría de Némesis o la estrella de la muerte

La intrigante teoría de Némesis, la misteriosa estrella de la muerte que podría estar vinculada a las extinciones periódicas que han afectado a nuestro planeta cada 26 M.A. La cual postularía un nefasto viaje fascinante a través del cosmos y la historia de la Tierra.

Según una teoría, propuesta por los científicos Jack Sepkoski y David Raup en la década de 1980, la vida sufría abruptos ciclos de destrucción y reestructuración de las especies. Este estudio realizado a partir de restos marinos del Pérmico revelo un evento cataclísmico que afecto a más del 90% de las especies a finales del período. Aproximadamente 26 M.A. después, a finales del Triásico se produciría una nueva devastación. Y así repitiendo el mismo ciclo temporal revelaron sendas catástrofes hasta la última acontecida hace unos 10 M.A. Algunas de ellas de masivas y nefastas influencias sobre las especies de fauna y vegetación.

En respuesta al misterioso ciclo de destrucción el profesor Richard Muller propuso una teoría nada descabellada. Una estrella compañera desconocida, a la que llamaron Némesis, podría orbitar alrededor del Sol en una órbita elíptica muy alargada. Se cree que esta estrella tiene un período orbital de aproximadamente 26 M.A., lo que podría coincidir con los ciclos de extinciones masivas en la Tierra.

La oscura naturaleza de Némesis «La estrella de la muerte»

El hecho de que no se halla avistado ninguna estrella gemela puede ser debido a un oscuro misterio. Pues podría ser una estrella enana apagada, y aun siendo enana de nombre su colosal masa seguiría siendo capaz de producir funestas perturbaciones cósmicas a su alrededor.

Némesis recibe su nombre de la antigua diosa griega que persigue implacablemente a los ricos y orgullosos. La teoría de Muller proponía una ruta a través del cinturón de asteroides situado entre Marte y Júpiter. Esto no terminaba de encajar con los ciclos de 26 M.A. Finalmente el doctor Piet Hut de Princeton, propuso una orbita alternativa más alargada. Esta si que se ajustaría a los requisitos temporales y que perturbaría el cinturón de Kuiper y la Nube de Oort. Un enorme cúmulo de restos de la formación del sistema solar, más allá de Neptuno, repleto de enormes asteroides y colosales cometas. En 1984 Muller y Hut anunciaron oficialmente la teoría de Némesis «La estrella de la muerte».

La idea de una estrella gemela no es algo inusual en el universo, sino que es algo bastante habitual. Se ha sugerido que estos eventos catastróficos podrían estar relacionados con la perturbación gravitacional causada por la órbita de Némesis. Además de interactuar con la Nube de Oort en su largo periplo a través de la orbita solar. Esto desencadenaría impactos de asteroides o cometas en la Tierra y todo el sistema solar.

Controversia científica por Némesis. Conclusión

Esta teoría ha generado un intenso debate en la comunidad científica. Algunos investigadores sugieren que las evidencias son insuficientes para respaldar la existencia de Némesis. Sobre todo por lo ancho de la orbita que podría hacer que la estrella no volviese a acercarse al sol y vagar por el espacio. Mientras que otros continúan explorando esta intrigante posibilidad.

Aunque aún no se ha encontrado evidencia directa de la existencia de Nemesis, el concepto ha capturado la imaginación de científicos y entusiastas por igual. La búsqueda de esta estrella hipotética continúa, alimentando la curiosidad sobre los misterios del universo y su impacto en la vida en la Tierra.

Hipótesis Shiva

Otra curiosa teoría en respuesta al misterioso ciclo cataclísmico es la sorprendente hipótesis Shiva. Una teoría revolucionaria que busca arrojar luz sobre el enigma de las extinciones masivas en nuestro planeta.

Esta hipótesis, nombrada en honor al poderoso dios hindú de la destrucción, fue desarrollada por el destacado científico Michael Rampino de la Universidad de Nueva York. Según esta teoría innovadora, las extinciones masivas podrían estar vinculadas a ciclos cósmicos generados por el movimiento del sistema solar al atravesar el denso plano medio galáctico cada 25-30 M.A. Es como una danza cósmica donde nuestro planeta es el protagonista involuntario de un drama celestial.

Este peculiar viaje galáctico podría desencadenar una serie de eventos catastróficos en nuestro sistema solar, alterando la estabilidad de las nubes de Oort y el cinturón de Kuiper. ¿El resultado? Una mayor posibilidad de desviación de cometas hacia el interior del sistema solar. Donde podrían colisionar con la Tierra, desencadenando un impacto meteorítico de proporciones épicas y desencadenando una crisis biótica a escala global.

A través de la hipótesis Shiva, los científicos están explorando nuevas fronteras en nuestra comprensión del universo y su impacto en la vida en la Tierra. Aunque aún hay mucho por descubrir, esta teoría desafía nuestra percepción del tiempo y del espacio. La cual nos invita a reflexionar sobre el papel de los eventos cósmicos en la historia de nuestro planeta.

Museos y Dinosaurios en Exposición

Gracias a los museos hoy podemos disfrutar del mundo antiguo, no sólo de otras culturas antiguas, sino de la fauna y de todo el entorno en el cual anduvieron. Pero de entre todos ellos ninguno capta nuestra atención, fantasía y pasión como los dinosaurios. Por ellos cualquier dinoloco como nosotros iría a donde fuera para disfrutarlos, y hay gran cantidad de turismo de dinosaurios por hacer.

Los Museos con Exposiciones de Fósiles de Dinosaurios Más Importantes y Famosos del Mundo

Explorar los fósiles de dinosaurios en museos es una experiencia fascinante que permite adentrarse en el pasado prehistórico de nuestro planeta. A continuación, presentamos una selección de los museos más destacados del mundo, conocidos por sus impresionantes colecciones de fósiles de dinosaurios. Este recorrido incluye instituciones de todos los continentes, cada una con sus tesoros paleontológicos únicos.

American Museum of Natural History (AMNH)

Ubicación: Nueva York, Estados Unidos
Dirección: 200 Central Park West & 79th St, New York, NY 10024-5102
Fósiles destacados: El famoso esqueleto del Tyrannosaurus rex, un ejemplar de Apatosaurus o Brontosaurus, también Styracosaurus, Edmontosaurus y el impresionante Allosaurus. Este museo es un referente mundial en paleontología, ofreciendo una vasta colección de fósiles que permite a los visitantes entender la evolución y diversidad de los dinosaurios.

Natural History Museum, Londres

Ubicación: Londres, Reino Unido
Dirección: Cromwell Rd, South Kensington, London SW7 5BD
Fósiles destacados: El icónico Diplodocus conocido como «Dippy«, el Baryonyx, un Stegosaurus y una colección de fósiles del Iguanodon. Este museo, con su arquitectura victoriana, ofrece una experiencia única y educativa sobre la historia natural de los dinosaurios.

Royal Tyrrell Museum

Ubicación: Drumheller, Alberta, Canadá
Dirección: 1500 N Dinosaur Trail, Drumheller, AB T0J 0Y0
Fósiles destacados: Cuentan con más de 30 esqueletos montados de dinosaurios de Albertosaurus, el Daspletosaurus, Camarasurus, Triceratops, Sinraptor, Borealopelta y una vasta colección de fósiles de hadrosaurios. Situado en el corazón del Valle de los Dinosaurios, el museo se dedica a la investigación y exhibición de fósiles de dinosaurios de Alberta.

Shandong Tianyu Nature Museum 

Ubicación: Pingyi Provincia de Shandong, China Oriental

Dirección: Beichanghuan Lu, Pingyi, Shandong, China

Fósiles destacados: El Shandong Tianyu Nature Museum es según el Libro Guinness de los Records el mayor museo de dinosaurios del planeta. Este alberga una de las colecciones más extensas y variadas de dinosaurios emplumados del Cretácico, como los famosos Confuciusornis, Tianyulong y Sinosauropteryx. Además de impresionantes esqueletos completos de especies como el Tyrannosaurus rex y el Triceratops. Estas majestuosas réplicas y originales se exhiben de manera que permiten a los visitantes apreciar tanto la escala como los detalles anatómicos de estos gigantes prehistóricos.

Museo Nacional de Historia Natural Smithsonian

Ubicación: Washington D.C., Estados Unidos
Dirección: 10th St. & Constitution Ave. NW, Washington, DC 20560
Fósiles destacados: El Triceratops, el Tyrannosaurus rex apodado «Wankel Rex o Devil Rex» y el Diplodocus. Este museo es conocido por su extensa colección de fósiles que abarca todas las épocas geológicas.

Field Museum of Natural History

Ubicación: Chicago, Estados Unidos
Dirección: 1400 S. Dusable Lake Shore Dr, Chicago, IL 60605
Fósiles destacados: Aquí encontraras a Sue, el Tyrannosaurus rex más completo jamás encontrado, el Archaeopterix y el Brachiosaurus. Este museo alberga una de las colecciones de fósiles más grandes del mundo y es un centro de investigación en paleontología.

Paleontological Museum of Liaoning

Ubicación: Shenyang provincia de Liaoning, China
Dirección: No. 60 Huanghe North Street, Shenyang, Liaoning, China
Fósiles destacados: Fosiles de Confuciusornis, el Sinornithosaurus y el Sinosauropteryx y el imponente Liaoningotitan de 50 pies de largo. Este museo es conocido por sus excepcionales fósiles de dinosaurios con plumas, que han revolucionado nuestra comprensión de la evolución de las aves.

Museo Egidio Feruglio (MEF)

Ubicación: Trelew, Argentina
Dirección: Av. Fontana 140, U9100GYO Trelew, Chubut, Argentina
Fósiles destacados: El Patagotitan mayorum, uno de los dinosaurios más grandes del mundo, con 38 metros de largo y casi 8 de altura, y el Giganotosaurus. Además de 15 nuevos dinosaurios diferentes, el único museo en Latinoamérica que presenta este nivel de diversidad, incluido el gigante carnívoro Tyrannotitan chubutensis. O un extraño espécimen llamado Manidens, uno de los dinosaurios más pequeños del mundo. Este museo se especializa en la rica paleontología de la Patagonia, una de las regiones más prolíficas en fósiles de dinosaurios.

Iziko South African Museum

Ubicación: Ciudad del Cabo, Sudáfrica
Dirección: 25 Queen Victoria St, Gardens, Cape Town, 8001, Sudáfrica
Fósiles destacados: El Massospondylus y el Heterodontosaurus. Este museo ofrece una visión única de los dinosaurios que habitaron el continente africano.

Australian Age of Dinosaurs Museum

Ubicación: Winton, Queensland, Australia
Dirección: Lot 1 Dinosaur Dr, Winton QLD 4735, Australia
Fósiles destacados: El Australovenator, el Diamantinasaurus y el Wintonotitan, entre otros, ya que este museo alberga una ingente cantidad y variedad de fósiles de la Australia prehistórica. Este museo se dedica a la preservación y estudio de los dinosaurios que aquí vivieron, con excavaciones activas y exposiciones fascinantes.

National Dinosaur Museum

Ubicación: Canberra, Australia
Dirección: 6 Gold Creek Rd, Nicholls ACT 2913, Australia
Fósiles destacados: El Muttaburrasaurus, el Stegosaurus, el Plateosaurus o el Minmi. No obstante aún hay muchos más, pues este es el museo de dinosaurios más grande de Australia y cuenta con una vasta colección de fósiles y réplicas. El museo alberga más de 150 modelos de dinosaurios, 23 esqueletos completos y más de 300 exhibiciones de fósiles individuales en su galería interior de varios niveles, así como un espacio de jardín con un T. rex animatrónico de 20 metros. La narración de su colección está vinculada a Australia, su historia y su preservación.

Moscow Paleontological Museum

Ubicación: Moscú, Rusia
Dirección: Profsoyuznaya St, b. 123, Moskva, Rusia, 117997
Fósiles destacados: El Tarbosaurus, el enorme Diplodocus o el Psittacosaurus. Este museo es uno de los más grandes de su tipo en Rusia y alberga una impresionante colección de fósiles de dinosaurios asiáticos.

Museo de la Evolución de Puebla

Ubicación: Puebla, México
Dirección: Zona de los Fuertes, Heroica Puebla de Zaragoza, Pue., México
Fósiles destacados: El Velafrons y el Coahuilaceratops. Este museo ofrece una amplia exposición de fósiles encontrados en México, destacando la rica historia paleontológica del país.

Royal Belgian Institute of Natural Sciences

Ubicación: Bruselas, Bélgica
Dirección: Rue Vautier 29, 1000 Bruxelles, Bélgica
Fósiles destacados: El Iguanodon bernissartensis. Este museo alberga una de las colecciones más grandes de Iguanodon, un dinosaurio herbívoro que vivió en Europa. Con una superficie de más de 3.000 m2 y decenas de ejemplares, la Dinosaur Gallery es la sala más grande de Europa dedicada íntegramente a los dinosaurios, su descubrimiento, su vida y su evolución.

En la galería podrás ver cómo murió el Olorotitan, aprender cómo se forman los fósiles y desafiar a un Pachycephalosaurus virtual. Escucha el grito del Parasaurolophus, descubre más sobre la cladística y dale a cada hadrosaurio su propia ornamentación en el cuello.

Dinosaur National Monument

Ubicación: Colorado/Utah, Estados Unidos
Dirección: 11625 E 1500 S, Jensen, UT 84035, Estados Unidos
Fósiles destacados: Los esqueletos de Stegosaurus, de Deinonychus y Allosaurus. Este monumento nacional ofrece la oportunidad de ver fósiles de dinosaurios en su contexto geológico original, en el famoso «Wall of Bones» o «Pared de los Huesos».

Museum für Naturkunde

Ubicación: Berlín, Alemania
Dirección: Invalidenstraße 43, 10115 Berlin, Alemania
Fósiles destacados: El Giraffatitan brancai, el más imponente, el Archaeopterix, el más raro. Este museo es conocido por su espectacular exhibición de dinosaurios, incluyendo uno de los esqueletos más completos y altos del mundo.

Estos museos no solo albergan algunas de las colecciones de fósiles de dinosaurios más impresionantes del mundo, sino que también ofrecen una oportunidad única para explorar y aprender sobre la historia de estos increíbles seres que una vez dominaron la Tierra.

Los Museos y Exposiciones de Fósiles de Dinosaurios por España

España, con su rica historia geológica y paleontológica, alberga una impresionante variedad de museos dedicados a los fósiles de dinosaurios. A continuación, se presenta una selección de los museos más destacados del país, cada uno ofreciendo una experiencia única y educativa sobre estos fascinantes seres prehistóricos.

Museo Nacional de Ciencias Naturales

Ubicación: Madrid
Dirección: Calle José Gutiérrez Abascal, 2, 28006 Madrid
Fósiles destacados: El esqueleto de un Diplodocus carnegiei, réplica del original que se encuentra en Pittsburg y que fue donado por Andrew Carnegie al rey Alfonso XIII a principios de 1900. También destacar entre las réplicas el esqueleto de Carnotaurus del Cretácico inferior de Argentina. Además de seis magníficos esqueletos recientemente expuestos al público: Allosaurus, Camptosaurus, Torvosaurus, Stegosaurus y dos especies de Camarasaurus, y restos de Baryonyx. Este museo es uno de los más antiguos y prestigiosos de España, con una vasta colección de fósiles que abarca diversas épocas geológicas.

Museo de Dinosaurios de Salas de los Infantes

Ubicación: Salas de los Infantes, Burgos
Dirección: Plaza Jesús Aparicio, 9, 09600 Salas de los Infantes, Burgos
Fósiles destacados: Los restos del Policanthus, Estegosáuridos, Alosáuridos, Dromeosáuridos, Iguanodontoideos, Demandasaurus y del Concavenator. Además de un asombroso cráneo de Barionyx. Este museo se centra en los descubrimientos paleontológicos de la Sierra de la Demanda, ofreciendo una visión detallada de los dinosaurios que habitaron esta región que forma parte importante de la ruta «Tierra de Dinosaurios».

Museo Paleontológico de Elche (MUPE)

Ubicación: Elche, Alicante
Dirección: Calle Sant Joan S/N, 03203 Elche, Alicante
Fósiles destacados: El Iguanodon y el Protoceratops. Además actualmente y de manera temporal se custodian los restos de Spinophorosaurus nigerensis, un nuevo género y especie de dinosaurio saurópodo, definido en 2009 y procedente de Níger. Este museo ofrece una amplia colección de fósiles de diversas épocas y lugares, destacando especialmente los hallazgos en la provincia de Alicante.

Dinópolis

Ubicación: Teruel
Dirección: Polígono los Planos, S/n, 44002 Teruel
Fósiles destacados: Contiene fósiles originales, como los del dinosaurio más grande de Europa Turiasaurus riodevensis o esqueletos prácticamente completos de Europelta y Proa, extraídos en Ariño. Unos magníficos hallazgos llevados a cabo por los paleontólogos de la Fundación Dinópolis. También aquí disfrutaras al ver réplicas de dinosaurios únicos en el mundo, como la de un Tyrannosaurus rex en posición de ataque o de la de un Giraffatitan, entre otras. Dinópolis es un parque temático y museo interactivo que combina educación y entretenimiento en Teruel capital. Además de constar de otros siete museos repartidos por la región, haciendo de la paleontología una experiencia divertida y accesible para todas las edades.

Museo Jurásico de Asturias (MUJA)

Ubicación: Colunga, Asturias
Dirección: Rasa de San Telmo, S/N, 33328 Colunga, Asturias
Fósiles destacados: Los restos de Alosaurios o Estegosaurio y los esqueletos de Camarasaurio y una pareja de Tiranosaurios rex. Además de la recreación de un Dilofosaurio en el exterior.

Ubicado en un lugar privilegiado de la costa del Principado a 155 metros sobre el nivel del mar, se alza un museo singular. Que bajo la forma de una gran huella tridáctila de dinosaurio, acoge una de las muestras más completas y didácticas del mundo sobre estos fascinantes reptiles. Al Mesozoico y sus tres períodos: Triásico, Jurásico y Cretácico, los hace referencia cada uno de los tres dedos de la impresionante gran huella que forma el edificio. En el interior, una estructura de madera procedente de bosques escandinavos forma un entramado de arcos de medio punto simulando las costillas de un dinosaurio y ofrecen al visitante la sensación casi mágica de un viaje en el tiempo.

El MUJA ofrece una extensa colección de fósiles y réplicas de dinosaurios encontrados en la “Costa de los Dinosaurios” situada en el sector litoral de Asturias comprendido entre las localidades de Gijón/Xixón y Ribadesella/Ribeseya y caracterizado por la abundancia de huellas y restos óseos de dinosaurios y otros reptiles jurásicos.

Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha

Ubicación: Cuenca
Dirección: Calle del Rio Gritos, 5, 16004 Cuenca
Fósiles destacados: Encontraras aquí magníficos ejemplares de restos del Pelecanimimus, Concavenator corcovatus y el Lohuecotitan pandafilandi, además de recreaciones de los mismos y del Abelisaurio, el Dromeosaurio y una manada de 6 Iguanodón. Este museo destaca por su colección de fósiles de los yacimientos conquenses de Las Hoyas (Cretácico Inferior de La Cierva) y Lo Hueco (Cretácico Superior de Fuentes), dos de los más importantes de España. La colección está compuesta por restos procedentes de yacimientos que abarcan los últimos 550 millones de años de la historia de la tierra, pero con una especial representación de los registros paleozoicos de Toledo y Ciudad Real, mesozoicos de Guadalajara y Cuenca y cenozoicos de toda la región.

Museo de Dinosaurios de Arén

Ubicación: Arén, Huesca
Dirección: Calle Mayor, 3, 22583 Arén, Huesca
Fósiles destacados: Restos del dinosaurio propio de la región Arenysaurus ardevoli conocido como «dinosaurio de Arén» y el Blasisaurus canudoi y gran cantidad de Hadrosaurios. También denominado como «el museo de los últimos dinosaurios de Europa» dado que debido a la edad del yacimiento hace pensar que en este, se encuentran los restos de los últimos dinosaurios que poblaron la tierra antes de su extinción. Se han encontrado más de 300 fósiles en muy buen estado lo que ha permitido hacer reconstrucciones completas de dinosaurios.

Este museo es una extensión del Museo Paleontológico de la Universidad de Zaragoza y en él se exhiben fósiles hallados en las excavaciones de la zona. Además ofrece una mirada detallada a los descubrimientos paleontológicos de la comarca de Ribagorza, donde descubrirás y disfrutaras de «La Ruta de los Dinosaurios de Arén» una zona rica en hallazgos de dinosaurios.

Museo Paleontológico de Galve

Ubicación: Galve, Teruel
Dirección: Calle Cuesta del Cura, 5, 44168 Galve, Teruel
Fósiles destacados: Se han descrito más de una quincena de especies tales como, el Aragosaurus ischiaticus y el Galvesaurus herrero, ornitópodos como Delapparentia e Iguanodon galvensis y Gideonmantellia. La geología de Galve representa más de 25 M.A. de historia de la Tierra, con sedimentos datados desde finales del Jurásico a principios del Cretácico. En ellos se han localizado más de 65 yacimientos paleontológicos, como el de Las Zabacheras, donde apareció Aragosaurus, el primer dinosaurio descrito en España. Además, podemos encontrar varios yacimientos de icnitas, algunos de ellos declarados bien de interés cultural. Este pequeño pero fascinante museo se centra en los descubrimientos realizados en Galve, una de las localidades más importantes para la paleontología en España.

Museo de la Conca Dellà

Ubicación: Isona, Lleida
Dirección: Calle del Museo, 4, 25650 Isona, Lleida
Fósiles destacados: Restos de titanosaurios y hadrosaurios. El Museo de la Conca Dellà lo forma un equipo dedicado a la investigación, conservación y divulgación del patrimonio arqueológico y paleontológico de un territorio que abarca desde el Montsec hasta los Pirineos. En este museo disfrutarás de los vestigios de espectaculares restos fósiles de dinosaurios que habitaron el Prepirineo hace más de 66 millones de años. Este museo ofrece una visión completa de los hallazgos paleontológicos en la comarca de Pallars Jussà, una región con una rica historia geológica.

Museo Ciencias Naturales de Arnedo «Santiago Jiménez» (MCNA)

Ubicación: Arnedo, La Rioja
Dirección: Edificio Nuevo Cinema, P.º de la Constitucion, 38, 26580 Arnedo, La Rioja
Fósiles destacados: Restos de varios dinosaurios del Cretácico, el cráneo de un Triceratops horridus, el de un Carnotauro o el de un Diplodocus, dientes y garras de dinosaurios carnívoros y huevos de dinosaurios fosilizados. Este museo ofrece una amplia colección de fósiles y es un centro de referencia para la paleontología en La Rioja.

Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza

Ubicación: Zaragoza
Dirección: Plaza Basilio Paraíso, 4, 50005, Zaragoza
Fósiles destacados: El Aragosaurus y otros fósiles de Hadrosaurios encontrados en Aragón. Este museo universitario alberga una importante colección de fósiles, destacando los hallazgos realizados por los equipos de investigación de la Universidad de Zaragoza.

Museo Tiempo de Dinosaurios de Morella

Ubicación: Morella, Castellón
Dirección: Costa del Trinquet, 4, 12300 Morella, Castellón
Fósiles destacados: Restos del Iguanodon y del Morelladon beltrani. Este museo se centra en los descubrimientos realizados en Morella, una de las localidades más importantes para la paleontología en la Comunidad Valenciana. Además el Museo Tiempo de Dinosaurios cuenta con un Escape Room dentro de sus instalaciones pensado para jugar en familia o con amigos. Este consta de diferentes pruebas que recorren todo el museo para desentrañar las pistas que llevan a recuperar el mapa robado sobre el último yacimiento descubierto en la zona. «Escapa en tiempos de dinosaurios» comienza con la lectura de los QR de este espacio donde la paleontóloga Andrea explica que han robado en el laboratorio y hay que seguir las pistas para encontrar el mapa que se han llevado en menos de 30 minutos.

Estos museos ofrecen una oportunidad única para explorar y aprender sobre la rica historia de los dinosaurios en España, cada uno con sus propias colecciones y hallazgos fascinantes que transportan a los visitantes a un tiempo en el que estos gigantes dominaban la Tierra.

Páginas: 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Resumen
Infosaurio. Tras la sombra de los dinosaurios. Un viaje educativo a la información y el disfrute visual de los dinosaurios.
Nombre del artículo
Infosaurio. Tras la sombra de los dinosaurios. Un viaje educativo a la información y el disfrute visual de los dinosaurios.
Descripción
Despliegue educativo visual enciclopédico para disfrutar aprendiendo todo sobre los dinosaurios y la vida en La Tierra prehistórica. Su nacimiento y evolución a través del tiempo y su diversidad de ecosistemas.
Autor
Publisher Name
Dinolocosaurio Rex
Publisher Logo